¿Cómo funcionan los créditos de compensación de emisiones de carbono? (Guía 2023)
Es la pregunta del billón de dólares, sobre todo ahora que el mercado de carbono sigue al alza y según las proyecciones alcanzará los 50.000 millones de dólares en 2030.
El dióxido de carbono tiene el mismo efecto sobre el clima independientemente del lugar o la fuente de emisiones. Así, una tonelada de dióxido de carbono absorbida de la atmósfera en una parte del globo puede ser anulada en otra para neutralizarla.
En otras palabras, las entidades pueden compensar el impacto de su huella apoyando proyectos que eliminen o reduzcan el CO2 o su gas equivalente. Estos proyectos reciben entonces créditos de compensación de carbono en el proceso que llaman compensación de carbono.
Hablaremos de cómo funcionan exactamente los créditos de compensación de carbono para guiarte este 2023, su propósito y cómo comprarlos. Para un principiante, empecemos por el principio explicando qué son los créditos de compensación de carbono.
¿Qué son los créditos de compensación de carbono?
Los créditos de compensación de carbono se refieren a reducciones de emisiones medibles y verificables de proyectos de acción por el clima. Estos proyectos reducen, eliminan o evitan las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Pero también hacen otras cosas aparte de reducir las emisiones de carbono.
La mayoría de los proyectos relacionados con el clima también aportan muchos otros beneficios positivos, como restaurar o proteger los ecosistemas y empoderar a las comunidades locales. Por no hablar de reducir, si no detener, la dependencia de los combustibles fósiles.
Pero para garantizar que los créditos son de alta calidad, los proyectos deben cumplir una rigurosa serie de criterios para pasar la verificación de agencias de tercera parte y normas líderes en carbono como Verra y Gold Standard.
- En teoría, un crédito de compensación equivale a una tonelada de CO2 reducida o eliminada.
Después de que una empresa o un particular compra el crédito de compensación de carbono, se retira permanentemente, por lo que no puede reutilizarse.
Aunque los créditos de compensación de carbono también se negocian en el mercado de carbono de cumplimiento (sistemas de comercio de derechos de emisión con fijación previa de límites máximos), son más frecuentes en el mercado voluntario de carbono. Esto se debe a que muchas otras empresas que no pertenecen a los sectores emisores buscan compensar sus emisiones voluntariamente. Los créditos que circulan en el MCV se conocen popularmente como compensaciones de carbono.
Entonces, ¿por qué crear compensaciones de carbono en primer lugar?
¿Cuál es el objetivo de los créditos de compensación de carbono?
El objetivo final de los créditos de compensación de carbono es reducir o evitar la emisión a la atmósfera de GEI que calientan el planeta.
Como se ha mencionado, un crédito de carbono representa el derecho a emitir una tonelada de CO2 o su gas equivalente. Según el Fondo de Defensa Medioambiental, eso equivale a unos 2.400 kilómetros conducidos en términos de huella de CO2.
Como el dióxido de carbono es el principal GEI, se habla simplemente de comercio de carbono. Pero también se mide la reducción de otros gases, como el metano y el óxido nitroso.
En el mercado de cumplimiento, los emisores reciben un determinado número de créditos de carbono (tope) que pueden intercambiar para ayudar a neutralizar o compensar las emisiones globales (comercio). Los créditos de carbono en este mercado se refieren a reducciones certificadas de emisiones o RCE que siguen un marco normativo. Estos créditos son emitidos y regulados por el gobierno.
Si las entidades reguladas emiten por encima de sus límites, deben comprar los créditos a otros para cumplir con el nivel exigido. Si les sobran porque emiten menos de su límite, pueden vender esos créditos a otros que les falten.
El principal objetivo del sistema es reducir el número de créditos con el tiempo para incentivar a los emisores a buscar formas de reducir su huella.
En el MCV, las cosas funcionan de forma diferente, pero todas tienen la misma intención. Los agentes del mercado no tienen que respetar ningún límite, sino que pueden decidir cuántas emisiones compensar comprando créditos de carbono. Y al igual que las empresas obligadas, las voluntarias quieren neutralizar su huella.
Las compensaciones de carbono en el MCV se denominan reducciones voluntarias de emisiones o RVE. Son independientes y no necesitan seguir la normativa gubernamental.
Como principiante en este espacio, quizá esté pensando cómo funcionan los créditos de compensación de carbono. Tal vez se pregunte cómo se calculan los créditos de carbono o si puede ganar dinero con las compensaciones de carbono. La buena noticia es que puede.
Sólo tiene que repasar esta guía sobre cómo puede ganar dinero produciendo y vendiendo compensaciones de carbono.
¿Cómo funcionan los créditos de compensación de emisiones de carbono para principiantes?
Si es usted propietario de una empresa, ¿puede comprar su salida de los problemas climáticos con créditos de compensación de carbono? Sí y no. ¿Cómo es eso?
Según la jerarquía de mitigación climática, la compra de créditos de carbono es la última opción. Significa que las empresas no deben utilizar los créditos de carbono como excusa para aplazar la reducción de emisiones en sus operaciones comerciales.
Pero eso no significa que la compensación del carbono sea inútil y que no funcione. Todo lo contrario...
Las ventas de créditos de compensación de carbono ayudan a canalizar el dinero hacia los proyectos adecuados que protegen los sumideros de carbono.
De hecho, muchos expertos del sector animan a las empresas no sólo a reducir drásticamente sus propias emisiones de carbono, sino también a invertir en acciones fuera de su cadena de valor.
Mover el dial del cambio climático es fundamental para lograr cero emisiones netas globales. Y una opción clave son los créditos de compensación de carbono.
Ofrecen a las empresas una excelente manera de financiar acciones climáticas como la protección de los sumideros naturales de carbono. Los créditos de carbono también son cruciales para ampliar las tecnologías de eliminación de carbono, que los científicos del clima consideran elementales para evitar que aumente el calentamiento global.
Y lo que es más importante, los créditos de compensación de carbono garantizan que las empresas pongan precio al impacto que sus operaciones tienen en el medio ambiente.
Lo mejor de todo es que la compensación de emisiones difíciles de eliminar mediante créditos de carbono atrae financiación a proyectos que reducen efectivamente las emisiones.
Las empresas deben evaluar periódicamente sus emisiones e incluirlas en los informes de sostenibilidad. En muchos países es obligatorio informar sobre las emisiones.
En Estados Unidos, las empresas que emiten 25.000 o más toneladas métricas de CO2 deben informar anualmente de sus emisiones a la EPA.
En California, el umbral es inferior: 10.000 toneladas métricas.
Si cree que invertir en créditos de compensación de carbono vale cada dólar, lo siguiente que debe saber es cómo comprarlos.
¿Cómo comprar créditos de compensación de carbono?
Obviamente, se estará preguntando cuánto vale un solo crédito de carbono. El precio real depende de algunos factores, como el tipo de proyecto y su ubicación.
Pero en general, los créditos de compensación de carbono cuestan entre 3 y 5 dólares por tonelada de CO2. Sin embargo, este precio del carbono aumentará drásticamente en la próxima década. Gracias a políticas climáticas más fuertes y a una mejor normalización del mercado.
De nuevo, se puede hacer compensación de carbono voluntariamente o para cumplir ciertas normativas.
Hay varias formas de adquirir créditos de compensación de carbono...
Una forma de hacerlo es solicitar la ayuda de un intermediario, previo pago, por supuesto. El corredor suele tener conocimientos sobre los distintos proyectos que se pueden apoyar con los créditos que usted va a pagar.
Los intermediarios cobran una tarifa basada en tu nivel de emisiones. Luego invierten una parte de tu pago en un determinado proyecto de reducción o eliminación de carbono, como la reforestación.
Usted obtiene entonces un certificado o algún tipo de prueba que demuestra que ha comprado el crédito de compensación. A continuación, puede utilizarlo para cumplir la normativa o para cualquier otro fin.
¿Sigue teniendo dudas sobre cómo funcionan los créditos de compensación de emisiones de carbono y cómo comprarlos?
Estos son los principales pasos que puede seguir para compensar con éxito las emisiones de carbono:
Paso nº 1. Calcule sus emisiones de carbono
Para un particular, esto será más fácil. Tiene que obtener todos los datos de su hogar y de las actividades individuales que emiten carbono.
Para una empresa, suele ser más difícil, ya que hay que recopilar mucha información y datos para obtener el total de emisiones. Cuanto más compleja sea la estructura de su organización, más difícil será identificar quién o quiénes son las fuentes de emisiones.
Normalmente, hacerlo implica identificar tres fuentes diferentes de emisiones: los alcances 1, 2 y 3.
Scope 1 se refiere a las emisiones directas procedentes de fuentes que la empresa posee o controla, mientras que el Scope 2 son las emisiones indirectas procedentes de los recursos de electricidad, vapor, calefacción y refrigeración que la empresa compra. El Alcance 3 son otras emisiones indirectas que proceden de la cadena de valor de la empresa.
El siguiente diagrama muestra los tipos comunes de fuentes de emisiones bajo cada alcance.
Para obtener una explicación más detallada sobre el cálculo de las emisiones, consulte esta guía completa aquí.
Paso 2 . Reducir las emisiones donde sea posible
Una vez obtenido el total de emisiones, puede utilizarlo para trabajar en su estrategia de sostenibilidad o descarbonización.
La iniciativa Science Based Target (SBTi) proporciona directrices a las empresas sobre cómo reducir las emisiones. El Estándar Net Zero de la organización se alinea con los objetivos del Acuerdo de París.
También puedes lograr reducciones de carbono en menor medida a través de tus acciones individuales. Por ejemplo, puedes cambiar a un transporte más ecológico o seguir una dieta más sostenible.
Paso nº 3 . Compensar las emisiones inevitables
Las emisiones que su empresa no pueda reducir pueden compensarse invirtiendo en proyectos de reducción del carbono. Pero tenga en cuenta que un proyecto debe estar certificado para emitir créditos de compensación de carbono.
Los principales organismos certificadores de carbono son Verra, Climate Action Reserve, Gold Standard, Plan Vivo y American Carbon Registry.
Verificar que un proyecto cumple los criterios es importante. Tiene que demostrar que sus reducciones de carbono son reales, adicionales, mensurables y permanentes. Sólo cumpliendo estos criterios los créditos de carbono que genera el proyecto son de alta calidad.
Una vez que haya adquirido los créditos de compensación de carbono correctos, debe ser transparente al respecto con las partes interesadas. Deben conocer su estrategia de compensación y saber qué proyectos se benefician de sus créditos.
La transparencia es crucial para evitar acusaciones de lavado verde. El lavado verde es una estratagema de marketing utilizada para convencer a la gente de que los productos, objetivos o políticas de una empresa son respetuosos con el medio ambiente.
Por tanto, debe demostrar que la compra de créditos de compensación de carbono le beneficia y es buena para su empresa. Y es la última opción que tiene para hacer frente a la contaminación que emite.
Comprar créditos de compensación de carbono
Evidentemente, compensar sus emisiones no es un último recurso. Aunque compensar las emisiones de carbono y comprar créditos de compensación no es tan difícil, debes saber cómo hacerlo y por dónde empezar.
Por no mencionar que hay un montón de mercados de créditos de carbono disponibles en línea para comenzar su búsqueda.
Pero si quiere asegurarse de que cada dólar que invierte en un proyecto de reducción o eliminación de carbono cuenta, prepárese para conocer los detalles. Puede empezar por saber quién emite créditos de carbono y seguir a partir de ahí.
También puede aprender qué créditos de carbono es mejor comprar para compensar su huella.
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